martes, 8 de octubre de 2013

GESUALDO NOSENGO (1902-1968)

LA PEDAGOGÍA DE LA PERSONA

(San Damiano d' Asti , 20 de julio de 1906 - Roma, 13 de mayo 1968)

Gran humanista y secular comprometido a infundir la levadura del Evangelio entre los jóvenes estudiantes, Gesualdo Nosengo nació en San Damiano d' Asti 20 de julio 1906 . Después de salir de la empresa de su padre, entró en la Compañía de St. Paul . Al mismo tiempo, se matriculó en la Universidad Católica , con especialización en Educación. Animador de grupos de jóvenes considerados con recelo por las autoridades fascistas , le gusta decir que la enseñanza no es una profesión sino una misión . El 18 de junio 1944 la fundación promueve UCIIM ( Unión Católica Italiana de docentes promedio) , que tiene en el centro de su visión de la pedagogía de Jesús Maestro . Junto a Tulio Piacentini fundó la Compañia de Jesús Maestro, destinada a educadores seglares, para reflexionar sobre el Evangelio y examinar los problemas profesionales a luz de la Persona, la palabra, la forma de actuar y los métodos de enseñanza de Jesucristo. Murió en Roma el 13 de mayo de 1968.



PRINCIPALES IDEAS PEDAGÓGICAS

  • La obra de Gesualdo se puede reagruparse en cinco grandes áreas: filosófico-pedagógica, didáctica-escolar, teología-catequética, socio-política-escolar y la reflexión sobre la laicidad.
  • Su perfil fue el de un educador comprometido con su vocación, que concibió como un servicio a los discípulos y a la verdad
  • El objeto de la pedagogía es la relación entre dos hombres; su posibilidad, su naturaleza, su actuarse, su fin.
  • Se enfocó en una pedagogía personalista como aquella que concibe a la persona según los principios y características que emergen de la tradición cristiana.
  • El maestro debía de servir a la verdad en sí mismo, por lo que no debía de conformarse con su conocimiento, sino que tenía que hacerla vida, convertirla en causa de su continuo crecimiento.
  • Nosengo miraba a Jesús como fuente de Gracia y de iluminación interior, pero también como modelo de actuación práctica.
  • El acto educativo era esencialmente un acto de amor que había que vivirlo como una generosidad y sincera entrega de la persona del maestro a los discípulos.
  • La vocación de servicio del profesor debía hacerse a través de su activa participación en las reuniones colectivas, de la paciencia, serenidad y sentido de la responsabilidad, de la cordial atención a las familias o de su asidua colaboración con otros centros o instancias profesionales.
  • El docente tenía que plantearse su propio recorrido personal en la adquisición y el dominio de su materia para poder conducir al discípulo por el mismo sendero.
  • La formación didáctica era pues la exigencia que planteaba el servicio a la verdad en la escuela. El maestro debía de buscar la verdad en el método y en la realidad concreta del alumno.
  • La didaxis era pues el continuo perfeccionamiento del docente mediante la observación atenta de su propia acción didáctica, una especia de examen metódicamente planteado por Nosengo, para la autoverificación de sus progresos personales y profesionales, así como de sus fracasos.
  • Establece los diez principios del personalismo: (centralismo del sujeto educando, ordenación de la educación al fin personal, exigencias de cooperación divina sobrenatural, necesidad de desarrollo integral, necesidad de un recto desarrollo corporal, necesidad de estar capacitado por el trabajo, exigencia de formación social…)
  • Una acción educativa conducida con amor, según las reglas justas y en sinceridad personal de intenciones, produce siempre notables resultados formativos en la misma persona del educador.